Semana del 27 de noviembre al 3 de diciembre de 2004

Emprendedores que se comen el mundo

Cuatro personas, tres negocios. Irrumpieron como neófitos en la alimentación. Hoy, disfrutan de un hueco en el sector gracias al ingenio y la perseverancia

ITSASO ÁLVAREZ

El arte de la buena mesa no sería posible sin la existencia de una perspectiva empresarial pues, como en otros ámbitos, también la gastronomía evoluciona y trata de buscar nichos en un mercado saturado de proyectos. Pero, para que cuaje una idea, ésta no sólo debe ser buena. Ingredientes básicos para triunfar en toda nueva empresa son la capacidad para aprender de los errores y empeñarse en ofrecer un producto innovador y de calidad.

El año pasado se pusieron en marcha en España 113.000 nuevos negocios. Muchos emprendedores señalan que, una vez superado el ‘via crucis’ de la financiación, los esfuerzos deben encaminarse a mantener a flote el negocio y viva la ilusión. Y eso es lo que han seguido al pie de la letra los protagonistas de esta historia; tres empresarios novatos que llegaron al mercado gastronómico con la intención de comerse el mundo o, al menos, llevarse un trozo del pastel.


ACEITES 'HOMENAJE'
María Luisa Bautisa y Moisés Ruiz

«Es una idea romántica, no buscamos dinero»

María Luisa Bautista ejercía la abogacía con éxito desde hace más de dos décadas, tocaba el violonchelo por afición, se escapaba en cuanto podía a contemplar obras de arte y mataba el poco tiempo libre que le quedabacocinando platos de comida sana y natural. Hace apenas unos meses, cambió los libros de leyes por olivos y las obras de arte por aceitunas. Apenas saca horas para la música, pero se deleita escuchando que ‘Aceites Homenaje’, la empresa de la que es propietaria junto con su hijo Moisés Ruiz, está cada vez más en boca de todos.

La historia que sus creadores tildan de «romántica» se desencadenó el pasado mes de febrero. María Luisa se planteó dar un giro de 180 grados a su vida cuando comprobó que, de los olivares que había heredado a la muerte de su padre –unos terrenos ubicados en Domingo Pérez, a cuarenta kilómetros de Toledo–, brotaba un fruto de excelente calidad; «una mina de oro líquido, capaz de generar un aceite digno de los mejores caldos de oliva virgen extra y los más exigentes paladares», apostilla.

Tras obtener la titularidad de las fincas, propiedad de su familia desde el siglo XIX, embarcó a su hijo, formado en Administración de Empresas, en un proyecto que se antojaba complicado aunque prometedor. María Luisa y Moisés lo dejaron todo «por dar una oportunidad a una idea que nos parecía romántica»: poner en el mercado el aceite resultante de esos olivos. «No buscamos hacernos millonarios, sólo dar un provecho a unas tierras que, de otro modo, se quedarían sin atender».
Los aceites de ‘Homenaje’ se elaboran con la variedad de aceituna cornicabra, que suele surgir en olivos con más de 150 años de antigüedad. Análisis en laboratorios han certificado que tienen un alto contenido de ácido oleico –lo que los hace muy beneficiosos para regular el colesterol– y de vitamina E, que ralentiza el envejecimiento de las células. La inversión inicial que María Luisa y Moisés tuvieron que hacer fue elevada: 25.000 euros. Estudiaron las normativas europeas que atañen a esta materia y las reglas específicas del etiquetado, el diseño de las botellas y los tapones; aprendieron de mercadotecnia y de balances económicos, entablaron contactos con proveedores, ficharon a una empresa de comunicación…
Nadie diría que se vieron algo ‘peces’ en algunos aspectos, pues ya han conseguido colocar una producción de 25.000 botellas en varias tiendas de ‘delicatessen’ de Madrid y en el ‘Club Gourmet’ de El Corte Inglés. Comercializan sus productos en envases de litro y de 500 mililitros. «Aceite de oliva virgen extra, en rama, sin filtrar y filtrado. De color oro y sabor a avellanas, manzana y hierba», recitan. El nombre de la marca lo eligieron en honor al antiguo propietario de los terrenos de olivares. El tiempo, que ha dotado de veteranía y calidad a los árboles, dirá también si la empresa prospera.

ACEITES HOMENAJE
Plaza de España, 18, 5ª planta,
oficina 17. Madrid.
Teléfono: 915591093
www.aceiteshomenaje.com




FRUTERÍA Y ZUMERÍA 'MACEDONIA'
Javier Iguaz

«Quería reinventar el mundo de la fruta»
¿Hay algo más adecuado que tomarse un zumo natural de auténtico mango brasileño mientras su frutero le dispensa la lista de la compra? Este alarde de comodidad y sofisticación es muy posible en el establecimiento ‘Macedonia’ de la capital de España que regenta Javier Iguaz, un polifacético empresario, nacido en el seno de una familia de boticarios y amante de la fruta fresca hasta el punto de que su sueño era verse vinculado a este mundo, pero desde una perspectiva diferente a la de los establecimientos tradicionales. Le llevó doce años consumar este sueño y espera tener otros doce para verlo crecer y convertirse en todo un éxito. «Estudié cuatro años de Farmacia y lo dejé. Después, cursé ‘Marketing’ y aprendí lo necesario para abrir la frutería. Estuve un año en el paro para montarla. Parece sencillo, pero no hay otra igual en España», advierte.
La intención de este cartagenero de nacimiento es «reinventar el mundo de la fruta». «Es un concepto de gastronomía diferente. No tiene nada que ver con el resto de los alimentos». El establecimiento abre de lunes a sábado, de nueve de la mañana a nueve de la noche. Además de zumos naturales, en ‘Macedonia’ se elaboran tartas de fruta, ensaladas, cremas de hortalizas y legumbres y sandwiches. Venden también frutos secos y conservas naturales. Uno de los platos estrella es el pollo con mango. Y lo que de verdad impresiona es la gama de colores.

«En cinco años me gustaría abrir otras tres tiendas», comenta Iguaz. Por lo pronto, al ser el único inversor en el negocio, ha hipotecado su casa. «Y también mi vida y mi pareja». Dice que le compensa, aunque reconoce que está buscando un socio. Le gustaría hacer de ‘Macedonia’ una marca de referencia dentro de la fruta española e implantarse en otras provincias, «una expansión controlada, primero en Barcelona y luego en alguna ciudad más de la costa mediterránea».
Javier Iguaz no oculta los problemas que plantea un negocio como éste: «Se comenten errores. Yo he tenido que hacer algunas reformas, como dar más espacio a la zumería», asegura. Pero también es verdad que, en dos años, se ha hecho con una clientela fija que va a diario a desayunar el pan con tomate, el queso con membrillo o los cereales con frutas recién cortadas. «Aquí no entran las grasas, quiero ser fiel a mi propia filosofía: esto no es un ‘fast food’ (comida rápida), sino un ‘fast-good’ (rápida y buena).

FRUTERÍA Y ZUMERÍA MACEDONIA
C / Santa Engracia, 130. Madrid.
T 913990773
www.macedonia.com.es


'ALACARTA', DEL RESTAURANTE A CASA
Lionel Ortola


«Añoraba una buena comida en la oficina»

‘Alacarta’ actúa de intermediario entre el restaurante y el cliente y se ocupa de organizar todo lo relacionado con la logística. Los pedidos se recogen por teléfono en una oficina, se pasan después al establecimiento elegido y, en una hora, un camarero entrega en mano el menú solicitado. En cinco años de funcionamiento, se ha hecho con una cartera de 20.000 clientes y 16 restaurantes se han adherido a la empresa, con lo que, desde sus inicios, ‘Alacarta’ ha triplicado el volumen de facturación. Más que suficiente para no tachar de engreído al inventor de esta afortunada empresa, Lionel Ortola, ex ‘broker’ de la Bolsa y hombre ingenioso, quien no duda en asegurar que «‘Alacarta’ es la mejor idea que he tenido. ¿Por qué no se le había ocurrido a ninguna empresa servir comida elaborada de calidad a domicilio?», se plantea.

La respuesta a esta pregunta llevó a Lionel Ortola a donde hoy está. Estaba cansado de solucionar las comidas a base de sandwiches, hamburguesas y bocadillos. El empleo bursátil era «muy absorbente» y le dejaba apenas tiempo para ir a casa a mediodía o tomar el menú en un restaurante. «Casi no me movía de mi sitio, echaba de menos una buena comida… ¡todos los días! No podía ser el único que me encontrara en esta situación, me dije».

De modo que se puso manos a la obra. Encontró en Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos empresas de restauración de calidad a domicilio que permitían a los clientes elegir entre los platos más selectos de establecimientos de prestigio. Se asesoró y acabó por aliarse con la gala ‘Chaud devant’. Lionel Ortola sería el socio industrial en España. Empezó con un capital de 120.200 euros. Para dar a conocer los menús, edita un catálogo y utiliza una web.

Basta marcar el número de teléfono y pedir la comida. ‘Alacarta’ cobra el precio del menú, IVA incluido, y otros 4,50 euros más en concepto de coste de entrega. El precio medio por comensal ronda los nueve euros. «Una ventaja es que, si lo comes en tu casa, donde tienes bebida en la nevera, te limitas a pagar la comida. La bebida pueden llegar a representar el 30% de la factura», explica Ortola. En la bandeja se incluyen cubiertos y servilletas.

Los establecimientos asociados a este servicio son tan variados que ofrecen la posibilidad de elegir entre comida castellana, vegetariana, china, griega, japonesa… La última novedad ha sido habilitar un servicio especial de empresas, que lleva el menú a la oficina. «Libertad de comer lo que le apetece cuando le apetece», proclama Ortola.


ALACARTA SERVICIO
de restaurante a domicilio
T 914 118 307 y 902 100 828
www.alacartamadrid.com


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