Semana del 24 al 30 de noviembre de 2003
Los nombres de los pescados
SOKOA
A medida que los barcos se alejan en
busca de nuevas pesquerías, la globalización
de los mares está trayendo a nuestros mercados
pescados que no eran habituales, como el fletán
o los atunes más o menos claros, primos de nuestros
bonitos y cimarrones. Discutir de peces resulta cada
vez más difícil, aun entre gentes de un
mismo país.
Sin embargo, los nombres populares han resistido hasta
ahora la globalización y a lo largo de la costa,
cada pocos kilómetros, se conoce al mismo pez
con denominaciones diferentes. Lo que los guipuzcoanos
llaman lamote, corrocones y cabrarrocas, los vizcaínos
conocen como breca, mublesy cabrachos, respectivamente.
Para aumentar la confusión, muchas veces interviene
la picardía, enredando más el léxico,
cuando se llama por el mismo nombre a especies menos
nobles y de menor precio. El equivalente del gato por
liebre en términos de pescado es el clásico
gallo por lenguado, pero hay otros muchos casos de peces
prestigiosos, como el cabracho, la dorada y el mero,
a los que se roba el apellido para ennoblecer a parientes
más pobres y menos sabrosos.
Cuando intervienen lenguas extranjeras el problema se
complica todavía más. Las traducciones
que suelen aparecer en las cartas de los restaurantes
para uso de turistas son pintorescas. Muchas veces se
intenta abusar de su ignorancia, como cuando se escribe
por dorada un rey o por mero el emperador, pero otras
veces es simplemente falta de oficio del traductor.
Nadie puede sospechar malicia si se traduce mero por
halibut, pez que no tiene ningún parecido y es
de menor valor gastronómico, o cuando se pone
en francés langostinos por 'langustines', que
serían unas deliciosas cigalas.
Un caso típico de estos galimatías es
el cabracho. Bajo este nombre se conocen tres especies
distintas: la 'Scorpena scrofa', la 'Scorpena porcus'
y el 'Sebastes-imperial'. La última, a la que
también se conoce por, es la peor del trío.
|