Este aceite lo elabora una cooperativa navarra fundada en 1992 que produce 1.500 toneladas anuales. La elaboración es muy estricta, ya que sólo se recolectan las olivas de las variedades Arróniz o Arbequina que permanecen en el árbol y alcanzan el óptimo estado de madurez; la extracción del aceite es mecánica, por lo que se consigue un zumo muy natural, de un precioso color verde amarillento y un olor que recuerda a la hierba fresca recién segada, suave, rematado en boca por un golpe final picante y amargo. Perfecto para aliñar ensaladas, salsas frías o sopas como el gazpacho y para añadirse en caliente a una salsa ya elaborada que hierve suave sobre el fuego, unas albóndigas, una merluza o unas patatas en salsa verde.