Semana del 12 al 18 de mayo de 2007

SANXENXO (MADRID)
El mar en Madrid

RAFAEL GARCÍA SANTOS

Más información Dirección: Ortega y Gasset, 40 28006 Madrid. Teléfono: 915 778 272. E-mail: sanxenxo@sanxenxo.com Cierra: Domingos noche, Semana Santa y agosto. Precio: 120/170 euros.

CALIFICACIÓN 7

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En esta suntuosísima marisquería se ofrecen piezas descomunales, las más grandes y las más frescas con las que los océanos satisfacen nuestras depredadoras y depravadas pasiones carnales. Sólo hay que tener un poco de suerte para encontrarse un dinosaurio marino. Langostas de 3,5 kilos, por ejemplo. ¡Que nadie tenga envidia! Tan sólo nos la enseñaron, pero nos tentaron con un rodaballo de 8 kilos al que no supimos decir que no, que nos sirvieron con memorables patatas y maravillosa ajada, de la que no dejamos ni una gota. ¡Que gelatinosidad! ¡Qué manjarosidad! ¡Qué jugosidad!

Claro que siempre conviene recordar, ya que el establecimiento gestionado por Diego Domínguez tiene tanta y tan variopinta clientela, a la que hay que satisfacer, que gusta el pescado poco hecho. Nunca olvidaremos el gozo que nos brindó tan romboidal pez a la gallega. Por si nos quedase alguna duda: ¡viva su majestad, viva el rey de los pescados!

Claro que con anterioridad habíamos disfrutado de un copioso picoteo que había tenido por protagonistas a las más insignes especialidades de la casa. Grandes sensaciones en sencillos condumios: un terso, bravío y perfectamente condimentado pulpo a feira; unos primorosos pimientos del Padrón doctamente fritos y tres jugosas empanadas de xoubas, de bacalao con pasas y de vieiras. A continuación una ostra gigante por barba, tres o cuatro percebes muy crecidos, una nécora troceada y una centolla completamente desmigada, incluidas las patas, en su caparazón, que tenía un ‘sí es no es’ de vino blanco o fino. Ya metidos en gula, un pedazo de lamprea, manjar en sí mismo, que contó con la potencia añadida de una reducción de sus entrañas y vino, que ponía acento popular a la exquisitez intrínseca de tan delicioso bicho.

Aunque ya se sabe qué hay que solicitar en el local, conviene echar una mirada al expositor y a la cartera. Lo mejor de lo fetén de lo excelso: almejas, camarones, cigalas, vieiras, navajas, berberechos, bogavantes, merluzas, lenguados, rape… siempre superlativo para comer en crudo, cocido o guisado con recetas de gran raigambre. Ante usted, uno de los últimos viajes en busca de los tesoros en perdición.