Semana del 23 al 29 de julio de 2005
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Dirección:
Ctra. Palencia-Riaño, km 29, dentro de
la población. 34131 Villoldo, Palencia.
Teléfono:
979827005
E-mail: andresfierro
2002@hotmail.com
Cierra: domingo
noche y lunes, excepto verano.
Precio: 40/60
euros
Menús degustación:
40 euros
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CALIFICACIÓN |
7 |
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ESTRELLA DEL BAJO CARRIÓN
(PALENCIA)
Casera e ilustrada
Platos sencillos, sustentados
en nobles y humildes materias primas del territorio,
a las que se aplican técnicas de cocción
modernas, ofreciendo sabores delicados y digestiones
dietéticas
RAFAEL GARCÍA SANTOS
El paso del tiempo y el éxito
han definido este restaurante que sabe perfectamente
dónde está en plena España
profunda y qué sabe hacer: cocina casera
de corte regional ilustrada. Platos sencillos, sustentados
en nobles y humildes materias primas del territorio,
a las que se aplican técnicas de cocción
modernas, ofreciendo sabores delicados y digestiones
dietéticas.
Actualizan la historia con sabiduría y en algunos
casos con chispa, pues hay propuestas ingeniosas aunque
siempre atemperadas, sin romper nunca con la memoria
histórica.
Al restaurante de las hermanas Pedraza, Pilar (en la
foto), Paula y Mercedes, que cuentan en los fogones
con el inestimable ayuda de Alfonso, hijo de la primera,
se acude a comer natural, bien, satisfactoriamente...
y, además, barato. Todo ello, en una atmósfera
campestre. En definitiva, el cliente tiene muy claro
lo que va a encontrar y recibir; y siempre sale recompensado
en su justa medida. La casa tiene muchos estandartes
que conviene conocer o rememorar.
Ahí están las finas y cremosas croquetas
de cabrales, que inducen a repetir, hechas con técnica
y sensibilidad. Y encontraremos también una puerilidad
irresistible por nobleza y artesanía: los pimientos
rojos asados, dulces y rústicos, uncidos con
aceite de oliva virgen y espolvoreados con sal marina.
Destacan las gloriosas alubias de la Vega de Saldaña,
tan sólo cocidas con agua, aceite, pimentón,
laurel y, al final, un poco de sal para expresar su
manjarosidad intrínseca; dos platos mejor que
uno. La menestra de verduras, hechas al dente y salteadas
en un santiamén para potenciar su gusto, aúnan
pureza, liviandad y ricura.
El
revuelto, o mejor dicho, la sopa cremosa de yemas de
huevo de campo con hongos, cebolla confitada y foie
gras, es un buen comienzo que podremos rematar con la
paletilla de lechazo entreasada y guisada. Este plato
ofrece otra manera de ver el cordero castellano conservando
la identidad tradicional.
Cada temporada hay tres o cuatro novedades interesantes
y nos permitimos destacar la ensalada de pulpo, puré
de alubias blancas, alcachofas y aceite de éstas;
impecables las hortalizas, el cefalópodo, los
realces y la escenificación. Y también
el cochinillo asado a baja temperatura, luego costrado,
que se ofrece con el contrapunto de un chutney de frutas.
Y estimulantes postres, que testimonian un mayor compromiso
con la alta cocina moderna. Por lo demás, dispone
de unas correctas habitaciones para pernoctar, comer
en la terraza en verano constituye un lujo y el trato
de las propietarias en el comedor es tan campechano
como educado..
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