Semana del 20 al 26 de diciembre de 2003

PIRIPI Dirección: Avda. Óscar Esplá, 30 03003 Madrid. Teléfono:965 227940 E-mail: banquetes@noumanolin.com Cierra: Siempre abierto. Precio: 60/70 euros

CALIFICACIÓN 7

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PIRIPI (MADRID)
Cocina de fácil asunción

Todo un fenómeno gastronómico social en el que las paellas, las verduras y las carnes son sus guisos fundamentales

RAFAEL GARCÍA SANTOS

Todo un fenómeno gastronómico social. Conecta a las mil maravillas con los anhelos de alicantinos y foráneos, que hacen de este establecimiento su segunda casa, en cuanto que se come hogareñamente productos y guisos que no conocen de gustos. Y es precisamente en esa sencillez, así como en las versiones populares, en las que el comensal debe centrarse, pues se trata del terreno en el que el restaurante de la familia Castelló proporciona mayores satisfacciones.

El menú ideal, o uno de ellos, ha de tener siempre determinados protagonistas. Nada más sentarse, un plato de jamón Joselito, del que el patriarca, don Vicente y su hijo José Juan, adquieren mil piezas al año. Las expenden tanto en este establecimiento como en el Neu Manolin, además de en sus respectivas barras. Ni que decir tiene que la selección y curación son optimas.

Luego, la parrillada de verduras, o lo que es lo mismo, alcachofas, calabacín, berenjena, espárragos y setas cultivadas, breve y precisamente planchadas, a la vez que uncidas con aceite de oliva; gratificante y dietética naturalidad. A continuación, procede que llegue otro gran momento: de bigotes, porque sin mostachos no se concibe la celebración –desde Santa Pola a Denia– de su majestad la gamba roja, que se sirve cada día por cientos en Piripi, con garantía de notabilidad.

Y para concluir la cuchipanda hay que entregarse a un pantagruélico arroz, por aquello de la cantidad de cereal que se dispone en la paella, así como por la generosidad de los tropiezos, pero no por la fuerza del sabor. Se aprecian en este sentido los fondos limpios, muy de agradecer, que impregnan el grano de atemperada suculencia manteniendo su pureza.

Si el de magro con verduras –humilde, dietético, pluripalatal y riquísimo– ha hecho historia entre los dieciséis platos que ofrece la casa, el de pieles de bacalao con pimientos rojos, verdes y amarillos, más garbanzos y rodajas de patatas, vuelve a tener enjundia en su pobreza, que no gustativa, preservando la inmaculabilidad.
Si al comensal le apetecen otras especialidades, puede elegir entre cigalas cocidas, sepionets o jibias diminutas salteadas con aceite de oliva, calamarcitos con ajos tiernos y guindilla. La barra es también una de las mejorcitas de España, única, dónde pueden degustarse los mismos platos, sin olvidar otra simpleza gulesca: las patatas fritas con lascas de ibérico y pimientos.