Semana del 7 al 13 de mayo de 2005

Dirección:Zaragoza, 50. 41001 Sevilla Teléfono:954 224 698 E-mail: casablanca64@eresmas.com Cierra: Domingos y agosto. Precio: 40/50 E.

CALIFICACIÓN 6

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CASABLANCA (SEVILLA)
De tapas por SEvilla

Es una opción ideal para comer en Sevilla, cosa que se puede hacer de pie o sentado en torno a una de las siete minúsculas mesas del fondo, aunque conviene reservar

RAFAEL GARCÍA SANTOS

El Casablanca dispone de una de las barras más prestigiosas de España y constituye un fenómeno social en la ciudad: siempre está abarrotado. Una opción ideal para comer en Sevilla, cosa que se puede hacer de pie o sentado en torno a una de las siete minúsculas mesas del fondo, aunque conviene reservar. Las especialidades son siempre las mismas y únicamente pueden estar supeditadas a la azarosa disponibilidad del mercado.

Inexcusable comenzar por las ricas ‘papas aliñás’ con aceite, cebolla, perejil y vinagre, que recién hechas, presentan una arrebatadora templanza. Luego, el pincho de las dos anchoas, en aceite y en vinagre (boquerón), sobre un costrón con salmorejo, que resulta muy gustoso. También es obligada alguna de sus delicadas sopas frías, especialmente el salmorejo, realmente refinado, muy suave en vinagre y ajo, que se acompaña con unas rústicas berenjenas fritas, al estilo cordobés.

La estrella es la fritura, especialmente de ortiguillas de mar, que salen crocantes por fuera y coulant por dentro, esfumándose en boca en un instante, dejando un paladar inmaculado, marino. Ortiguillas abundantes y lo que se tercie: acedías, salmonetes, pijotas… siempre de la máxima calidad y sin aroma aceitoso ni pringoso. Llegados a este punto, es el momento de meterse entre pecho y espalda un platillo o una fuente de puntillitas salteadas con aceite, ajo y guindilla, que se sirven solas o acompañadas con pequeñas habas sin pelar (la primera opción es preferible).

Y para concluir, si es que aún no estamos ahítos, un guiso de carne, que se hace a la antigua usanza con buena mano. Harto gratificante es la carrillera de ternera al vino tinto, graciosamente aromatizada con hierbas.

Hasta aquí lo más meritorio. También hay que tener en consideración los langostinos de Sanlúcar cocidos, que están bien. La tortilla de patata al whisky –en realidad es al brandy– tiene encanto, y obedece al más puro estilo andaluz, una terrina de patata realzada con un ajos confitados. Sólo se sirve por la noche. Y a su vez caben algunos guisos primarios, como los fideos con almejas, la ventresca de atún en temporada y el rabo de toro a la andaluza. El ambiente, sevillanísimo, y el precio, razonable, acrecentan el interés.