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TAU CERÁMICA

Entrevista a Querejeta
Todo un clásico
(por Juanma Iturriaga)
La afición
Dos equipos españoles
en la fase final
 

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TAU CERÁMICA / ENTREVISTA A JOSEAN QUEREJETA, PRESIDENTE DEL BASKONIA

"Ya somos parte de la élite"

"Lo importante es no haber perdido el espíritu competitivo pese a las bajas"
DAVID GONZÁLEZ/VITORIA

Querejeta se muestra conforme con lo realizado pero aspira al título. / Igor Aizpuru
 

"Ojalá la NBA se fije
siempre en nosotros"
DAVID GONZÁLEZ/VITORIA
Charlar con Josean Querejeta y no mentar situaciones tan decepcionantes como la de Drobnjak, las posibilidades reales de que Vitoria recupere la 'Final Four' arrebatada hace unos años al romper con el monopolio de la FIBA o el voraz apetito de la NBA son temas imprescindibles.

Para hacer algo grande en el Sazka Arena se necesitará de todo el arsenal azulgrana, Drobnjak incluido. ¿Qué ocurre con él?
Ya dije en su momento que no iba a estar constantemente hablando de Drobnjak. Drobnjak es un jugador más de la plantilla. Está claro que, hasta ahora, no ha rendido al nivel que todos esperábamos. Por delante tiene una oportunidad histórica como la ‘Final Four’. Y más adelante los ‘play off’ de la ACB para demostrar que es el gran jugador que todos pensábamos en verano.

Todos los ojeadores de la NBA estarán en Praga. ¿Teme que uno o dos de sus jugadores puedan emigrar hacia los Estados Unidos el próximo verano?
No sé, es posible. Porque la NBA siempre se fija en los mejores jugadores y es evidente que nosotros los tenemos. Ojalá siempre ocurra eso. Ojalá tengamos el nivel competitivo y de jugadores lo suficientemente buenos como para que la NBA se fije en nosotros constantemente.

¿Será la penúltima final de Scola como baskonista?
Bueno, en este momento no pienso en eso. Ahora pienso en la ‘Final Four’, luego en los ‘play off’. Y cuando termine todo será el momento de plantear las cosas que haya que plantear.

¿Aprovechará en Praga para reclamar una ‘Final Four’ a pesar de que la Euroliga apuesta ahora por ciudades grandes?
La Euroliga está en deuda con Vitoria. En su momento, cuando hicimos una apuesta muy fuerte por cambiarnos de competición, perdimos una Euroliga concedida por la FIBA. Quizá en este momento se está optando por ese tipo de ciudades y de competición, pero vamos a ver si en un futuro las cosas pueden cambiar. La idea que siempre hemos tenido y por la que hemos luchado es la de traer a Vitoria una ‘Final Four’.

Una adivinanza para terminar; Earl Williams, 31 puntos. ¿De qué partido se trata?
Fue la final (de la antigua Euroliga) que jugamos contra el Maccabi cuando estaba en el Real Madrid. Ganamos en Berlín (1980). Creo que por tres-cuatro puntos (89-85). Era la primera vez que como jugador disputaba una final de competición europea. Me acuerdo que jugué unos minutos, que metí dos tiros libres, que fuimos ganando casi todo el partido, que tenía grandísimos compañeros como Walter (Szcerbiak), Rullán, Corbalán, Iturriaga... No tenía ni la trascendencia mediática ni el seguimiento de hoy, pero evidentemente era el máximo título que había.


Su agenda personal rebosa de compromisos. El día se le hace corto ante lo que se avecina: la segunda incursión en una 'Final Four' de la Euroliga. Josean Querejeta la degusta en privado. Aparentemente tranquilo, pero con la ambición de ganarla. Para algo es el máximo hacedor del que posiblemente es el club con mayor capacidad en Europa.

A grandes eventos, grandes discursos. ¿Cuál es entonces su lema para Praga?
Estamos acostumbrándonos a estar en la élite. Estábamos en la de la ACB y, desde luego, en los últimos años claramente nos hemos ganado por méritos propios estar en la élite europea. Creo que es un mérito grandísimo de todo el club y de todo lo que hay alrededor que vayamos por segundo año consecutivo a una 'Final Four' desde una ciudad de doscientos y poco mil habitantes. Enfrentándonos a ciudades, como el año pasado, de varios millones de personas. Siempre hemos sido ambiciosos. Siempre hemos querido competir al más alto nivel y, aunque estamos pasando por una situación quizá límite en cuanto a nuestras posibilidades, seguiremos trabajando para seguir en el futuro a esta altura.

¿Recuerda que hace un año se hablaba de 'hito' al calificar el pase a la 'Final Four' de Moscú? ¿Qué etiqueta coloca ahora?
La verdad es que ya desde el verano éste era un año difícil. A la baja de Ivanovic se unieron las de Macijauskas y Calderón. No era fácil, pero creo que se ha construido un equipo que compite, que es lo más importante. Ha ganado la Supercopa, la Copa, va arriba en la Liga ACB y está en la 'Final Four'. No haber perdido ese espíritu competitivo pese a las bajas es lo verdaderamente importante. Ése es nuestro reto de cara al futuro. Seguro que en los próximos años también tendremos bajas, pero hay que seguir compitiendo al máximo nivel, aunque evidentemente no siempre será posible ganar títulos porque hay equipos muy buenos. No solamente en ACB sino en Europa.

Cambian jugadores, entrenadores y el rendimiento sube. ¿Quizá es que existe un 'sello Baskonia'?
El club tiene experiencia, una buena estructura y no es porque lo diga yo sino que lo reconoce casi todo el mundo. Tiene un seguimiento alto, una buena situación general en todo su entorno, a nivel institucional, aficionados, comercial... Y eso hace que el club sea muy sólido también a nivel económico. No tenemos los presupuestos de otros, ni de Barcelona ni de CSKA, ni mucho menos del Maccabi, pero siempre hemos tenido un nivel de exigencia alto y así continuaremos.

¿Por presupuesto siguen fuera de la 'Final Four' y del 'top 8'?
No lo sé porque desconozco el presupuesto del Efes, por ejemplo. Pero tanto Madrid, Barcelona, CSKA, Maccabi, Panathinaikos... Todos esos están bastante por encima.
"Nadie lo ha logrado"

¿Es consciente de que el equipo ha enlazado cinco finales seguidas?
Sí, desde luego en la ACB no lo ha hecho nadie. Es difícil mantener ese ritmo. También tenemos que pensar que en cualquier momento pueden ocurrir triunfos y derrotas, esto es el mundo del deporte. Y que va a pasar. Mientras tanto, disfrutemos de estar en todas las buenas situaciones. Disfrutamos muchísimo en la Copa, ganándola y con un ambiente fenomenal. Seguro que, pese a los resultados que vaya a ver en Praga, disfrutaremos. Porque, una vez más, somos el único equipo vasco capaz de llevar el nombre, no sólo de su territorio, sino de todo el país, fuera de nuestras fronteras. Eso es importante.

Corren el riesgo de malacostumbrar a la afición, pero también sube el caché del club. Ahora es más atractivo para los jugadores de élite.
Sí, porque los jugadores de élite siempre quieren ir a equipos punteros de la Euroliga. Nos hemos ganado ese caché. En este momento, cuando te diriges a los agentes de los mejores jugadores, somos reconocidos. En base a años de trabajo nos hemos ganado esa consideración.

Vuelta a Praga. ¿Tiene la sensación de que es la final más abierta de los últimos años, que puede ocurrir de todo?
No se sabe porque estos torneos de pocos equipos y días siempre deparan muchas sorpresas. Nunca se sabe si llegan bien de forma, con algún lesionado, en un momento álgido... Experiencias tenemos todas en ese sentido. Este año en la Copa del Rey, el gran favorito para todo el mundo era el Unicaja y no jugó la final. Primero, nos enfrentamos a un grandísimo equipo. El mejor de Europa en los últimos años. Por el otro cruce está el líder de la ACB y otro grandísimo equipo. Cualquiera puede ganar y todos son equipos de élite.

A diferencia del año pasado, la mayoría de la plantilla ya ha disputado una 'Final Four'. ¿Un factor relevante?

A medida que vas ganando experiencia, lógicamente los jugadores se acostumbran a estas cosas. Quizá el año pasado fuimos de tapados. Pero éste, después de jugar tres finales de seis ediciones, ya no somos ningún tapado. Habrá más favoritos que nosotros por su trayectoria, como Maccabi o CSKA, pero evidentemente estamos entre los cuatro mejores, haciéndolo en una trayectoria de muchos años. Ya no podemos sorprender a nadie.

Algún integrante de la plantilla tiene el título grabado entre ceja y ceja. ¿Le ocurre igual?
Es el gran título, lo máximo en el baloncesto europeo. Más no hay nada. Hemos jugado dos finales y perdimos. Evidentemente nos haría una gran ilusión ganarla. Pero aparte de esa ilusión, lo más difícil es estar ahí. Porque los caminos son muy complicados y sólo quedan los 'grandes-grandes'. Estamos otra vez ahí, vamos a disfrutar del momento. Y prepararnos para, si este año no lo conseguimos, ver si lo logramos en el futuro.

¿El Maccabi resulta tan temible fuera de la cancha, por sus conexiones políticas, como dentro de ella?
Sólo puedo hablar de lo que ocurre dentro de la cancha. Es evidente que es el equipo del estado israelí, el más representativo de Israel. Lleva muchísimos seguidores, no sólo de su país sino de toda Europa. Será sin duda la afición más numerosa. Dentro de la cancha, es un bloque que ha perdido a Jasikevicius, pero ha incorporado a muchos jugadores y su nivel competitivo es igual o superior al del año pasado por mucho que se diga. Las pérdidas que ha tenido el TAU, comparativamente, son más significativas que las del Maccabi. Pero, en definitiva, los dos hemos conseguido mantener un alto nivel competitivo. Por eso nos hemos clasificado para la 'Final Four'.


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