Antes de entrar en el proceso de adopción, los futuros padres han de tener muy claro que están dispuestos no sólo a adoptar -cuando se agotan otras vías de procreación ésta es la única salida-, sino también saber que incorporarán en sus vidas y para siempre a un ser de otra raza y otro origen muy distinto al nuestro. Tendrán que superar esa barrera psicológica y aceptar que un día su hija les preguntará por qué tengo los ojos rasgados o mi piel es de otro color.
Una vez aceptan este compromiso el proceso debe seguir su curso legal, acudir a las instituciones necesarias -normalmente a las delegaciones territoriales de Salud y Asuntos Sociales-, pasar las diversas entrevistas, los exámenes psicotécnicos, preparar toda la documentación, etc. Este procedimiento dura aproximadamente unos siete u ocho meses, tras lo cual, si todo va bien se obtiene la "idoneidad". Esto significa que las instituciones locales, después de realizar todas las pruebas pertinentes, certifican que la pareja, la madre o el padre monoparental gozan de la capacidad necesaria para adoptar. Es decir, se aseguran de algún modo que el futuro niño va a parar a una familia con capacidad y madurez suficiente como para educar a un menor.
Tras la obtención de la idoneidad, las familias pueden acudir a una ECAI autorizada para continuar el proceso de adopción o bien, como algunas hacen, realizar la tramitación por su cuenta. La ECAI ayuda a las familias a presentar su solicitud de adopción en el país donde trabajen, en nuestro caso China, a recoger toda la documentación requerida por dicho país y les aconseja durante todo el proceso. Una vez reunido el expediente se manda a Beijing y entra en el Centro Chino de Adopción, donde se volverá a estudiar. El Centro Chino de Adopción es la única institución en China que tiene a su cargo la responsabilidad de la adopción internacional, con carácter de bienestar público y sin ánimo de lucro. Localiza por todo el país y asigna niños susceptibles de ser adoptados a las familias adoptantes extranjeras que cumplen los requisitos de la Ley de Adopción de la República Popular China y envía la invitación de viaje para que esos futuros padres acudan a recoger a sus hijos.
Los documentos que exige el Centro Chino de Adopciones son los siguientes:
- Solicitud de adopción internacional escrita por los propios solicitantes
- Certificado de nacimiento
- Certificado de estado civil
- Certificado de profesión, bienes ingresos y propiedades
- Certificado médico
- Certificado de penales
- Informe psico-social
- Certificado de idoneidad expedido por el país de origen de los padres solicitantes
- Fotocopia del pasaporte de los solicitantes
- Dos fotos tamaño carné de cada uno de los padres solicitantes y seis fotos del entorno familiar donde residirá el menor.
Nada más llegar el expediente con toda la documentación a las oficinas del Centro Chino de Adopción adquiere una fecha de entrada y cuando pasa todos los controles y no es rechazado, entra oficialmente al Departamento de Revisión de Documentos II, donde recibe una fecha de registro, fundamental para seguir el proceso del mismo. Esta fecha de registro debe recordarse en todo momento, pues de ella dependerá en qué año y día se viaje a China a adoptar. El Centro Chino de Adopción asigna niñas y niños a las familias adoptantes dependiendo de la fecha de registro y va realizando cortes que determinan cuánta gente viajará próximamente a recoger a sus hijos.